Sentado al pie de la mezquita,
maravillado por sus calles entrecruzadas.
Guíate por ti solo
piérdete buscando la encrucijada.
Suerte tuve, una bella sin salida
acabada en patio andaluz rodeado de
mil flores
cien colores
y una flamenca bonita
regando rosas y claveles.
Mientras, me miraba tras negros cristales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario